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A veces necesitamos de esa experiencia que nos entrega una buena cinta de terror en el cine o también la adrenalina de una buena película de acción, pero muchas otras veces necesitamos de una película que simplemente se encargue de relatarnos una historia común y corriente; una historia que nos llegue a identificar por lo real que aparenta ser. Con esto me estoy refiriendo incluso a la historia de un tipo que ingresa a trabajar, a modo de prueba, en un supermercado.
¿Qué puede tener esto de interesante?
Créanme, muchísimo; y de ello nos relata la película alemana "In den Gängen" (2018) de Thomas Stuber; película que hoy vengo a recomendarles y en la cual veo vagamente ciertos detalles que se acercan al trabajo del cineasta británico Ken Loach.
Los que siguen el blog desde sus inicios quizás recuerdan la cinta holandesa "Nothing Personal" (2009) escrita y dirigida por Urszula Antoniak. Si la traigo a la memoria es porque ambas películas poseen una pasividad muy especial en su desarrollo, con una atmósfera cargada de silencios. Finalmente ambas películas terminan por entregarnos una historia muy valiosa, incluso más de lo que aparentan en un principio, ya que sus historias nos muestran personajes y sentimientos muy reales: la soledad, la desconfianza, las ganas de surgir desde abajo, la lucha contra la depresión y sus, muchas veces, graves consecuencias. También la cinta nos habla de la importancia de los detalles; de esos detalles que por pequeños que estos puedan parecer, son a fin de cuentas lo suficientemente importantes como para llegar a generar incluso una sonrisa en alguien, y así alegrar lo monótono del día a día.
Increíble el trabajo interpretativo del actor Franz Rogowski en el protagónico. Me causa muchísima curiosidad su débil pero desgarradora voz. Cada una de las pocas palabras que comparte con sus compañeros, parecieran venir precedidas de un fuerte dolor que no se logra identificar, un dolor que viene desde muy adentro; pero sus breves palabras, son sustituidas por lo que proyecta su mirada. Todo lo que el protagonista no logró decir en la película, en realidad sí lo dijeron sus ojos.
En español a "In den Gängen" se le conoce como "A la vuelta de la esquina". No sé quién fue el "talentoso" que le dio tal título alternativo... ¿? bastante desafortunado fue. Los dejo con un pequeño clip y los invito posteriormente a buscar la película.
¿Qué puede tener esto de interesante?
Créanme, muchísimo; y de ello nos relata la película alemana "In den Gängen" (2018) de Thomas Stuber; película que hoy vengo a recomendarles y en la cual veo vagamente ciertos detalles que se acercan al trabajo del cineasta británico Ken Loach.
Los que siguen el blog desde sus inicios quizás recuerdan la cinta holandesa "Nothing Personal" (2009) escrita y dirigida por Urszula Antoniak. Si la traigo a la memoria es porque ambas películas poseen una pasividad muy especial en su desarrollo, con una atmósfera cargada de silencios. Finalmente ambas películas terminan por entregarnos una historia muy valiosa, incluso más de lo que aparentan en un principio, ya que sus historias nos muestran personajes y sentimientos muy reales: la soledad, la desconfianza, las ganas de surgir desde abajo, la lucha contra la depresión y sus, muchas veces, graves consecuencias. También la cinta nos habla de la importancia de los detalles; de esos detalles que por pequeños que estos puedan parecer, son a fin de cuentas lo suficientemente importantes como para llegar a generar incluso una sonrisa en alguien, y así alegrar lo monótono del día a día.
La película nos habla de Christian, el nuevo reponedor de un gran supermercado de provincia en Alemania. En silencio, Christian se sumerge en el universo desconocido de los largos pasillos, el perpetuo orden del almacén y la mecánica del montacargas. Bruno, que trabaja en la sección de bebidas, se hace cargo de él y le enseña trucos y mañas. En los pasillos Christian conoce además a Marion, quien trabaja en el pasillo siguiente y que lo cautiva con su áspero carisma y sus coqueteos. Pero ella está casada, aunque su matrimonio no parece feliz.
Increíble el trabajo interpretativo del actor Franz Rogowski en el protagónico. Me causa muchísima curiosidad su débil pero desgarradora voz. Cada una de las pocas palabras que comparte con sus compañeros, parecieran venir precedidas de un fuerte dolor que no se logra identificar, un dolor que viene desde muy adentro; pero sus breves palabras, son sustituidas por lo que proyecta su mirada. Todo lo que el protagonista no logró decir en la película, en realidad sí lo dijeron sus ojos.
En español a "In den Gängen" se le conoce como "A la vuelta de la esquina". No sé quién fue el "talentoso" que le dio tal título alternativo... ¿? bastante desafortunado fue. Los dejo con un pequeño clip y los invito posteriormente a buscar la película.
¡PLAY!
